“Una vez que te detienes, se acabó!”
Antes de llegar a la oficina, Marina Wille ya le ha dedicado dos o tres horas a hacer ejercicio y a pasear a su perro.
Marina lleva once años viviendo en Dubái. Desde 2020 ocupa el puesto de directora de Recursos Humanos para la región de Oriente Medio y Asia Meridional en Hellmann.
Nacida en Lübeck, en el norte de Alemania, siempre ha querido viajar y trabajar a nivel internacional. Dubái es el centro perfecto para ello. Pero sus vacaciones no las pasa plácidamente en la playa, sino que es muy activa. Entre otras cosas, escaló el monte Kilimanjaro y se sacó la licencia de buceo hace unos años.
"El buceo y el alpinismo son formas maravillosas de desconectar y pensar, de percibir el mundo que te rodea sin distracciones. Es un equilibrio perfecto para Dubai, donde siempre hay mucho ruido y movimiento, y para mi apretada rutina laboral diaria".
Otro equilibrio para ella es el deporte. Durante dos años, practicó el boxeo y participó en competiciones, y más tarde descubrió el remo en bote de dragón. Al parecer, los dos deportes no eran lo suficientemente desafiantes para Marina, así que se enfrentó a la Mina Desert Run en 2021 y quedó primera en su categoría. Se unió a la escena local del triatlón y desde entonces se entrena casi a diario. Un entrenador le confecciona el plan de entrenamiento. Hay que estar bien preparado para correr un triatlón, de lo contrario las lesiones pueden aparecer rápidamente.
Incluso los días libres y las salidas con los amigos deben planificarse cuidadosamente. Dos veces a la semana nada y monta en bicicleta con un grupo de entrenamiento. Entrenar juntos es más divertido y dentro del grupo todos se empujan mutuamente para alcanzar el máximo rendimiento. Compartir experiencias también es muy importante para Marina y sus amigos afines. En verano, los entrenamientos empiezan a las 4 de la mañana, porque si no el sol abrasador sería insoportable.
Marina también encuentra tiempo para su otra pasión: los perros. En Dubai hay muchos perros callejeros y los refugios de animales están saturados. Esto se debe a varias razones: por un lado, los perros no se consideran animales de compañía en el mundo árabe y, por otro, razas como los huskies son un símbolo de estatus. Sin embargo, los dueños suelen estar agobiados y entregan los perros a los refugios o simplemente los abandonan. Incluso los expatriados que abandonan los emiratos no pueden y no siempre quieren llevarse a sus amigos de cuatro patas.
Marina colabora activamente en el Centro de Perros Callejeros, que se financia íntegramente con donaciones desde hace ocho años. Ella misma ha acogido una mezcla de pastor alemán, así como una mezcla de saluki. Para mantenerse flexible a pesar de tener un perro, ha contratado a un paseador de perros, y cuando viaja utiliza uno de los grandes hoteles para perros.
Para ella es muy práctico que Dubái tenga casi todos los servicios que puedas imaginar. Por ejemplo, una empresa le entrega a domicilio las comidas diarias con las calorías que necesita para sus entrenamientos. "Mi día está tan cargado que no puedo cocinar nada", admite alegremente.
Esta primavera, finalmente participó en su primer Medio Ironman en Dubai, lo que significa nadar 2 km (1,2 millas), montar en bicicleta 90 km (55,9 millas) y correr 21 km (13 millas). Tras 6 horas y 40 minutos, ¡lo consiguió! Unos meses después, incluso mejoró ese tiempo a 5 horas y 50 minutos en otro Medio Ironman en los Países Bajos.
Su secreto: "No te detengas. Una vez que te detienes, se acabó. Siempre hay que establecer pequeños retos. Llegar al punto de referencia, y decir ahora sigo un poco más y así sucesivamente. La mentalidad apropiada es muy importante".
Fiel a su lema "¡No pienses, sigue adelante!", ya se ha apuntado al siguiente Ironman completo en México, esta vez con el doble de recorrido en las tres disciplinas.
La determinación de Marina también le ha ayudado en su trabajo. Cuando se hizo cargo del departamento de RRHH de la sede central de Dubai hace dos años y medio, había mucho que hacer. Para no sobrecargarse ni sobrecargar a su equipo, estableció objetivos pequeños y alcanzables y creó un plan de proyectos que ejecutan juntos y sobre el que reflexionan una y otra vez. Como en un triatlón, los pequeños éxitos se celebran.
Y el éxito le da la razón. A pesar de la pandemia, ha sido capaz de crear un equipo fuerte y poner en marcha muchos proyectos.
"Lo más importante es ser constante, trabajar bien en equipo y no rendirse nunca".
